El domingo en la iglesia durante la homilia el padre dijo algo que me llamo la atención, comento que en ocasiones debemos: “Tomar distancia de los demas para poder darnos cuenta de la realidad de las cosas, y debemos subir al arbol de la sabiduria, para poder descubrir nuestra realidad, pero luego bajar y encontrarnos con la vida cotidiana, con las alegrias, pero tambien con las tristezas y angustias, es en esa vida cotidiana donde pueden comenzar a operarse los cambios en nuestras vidas”

De repente pense que aunque vivimos en sociedad y no somos islas,  aveces la soledad es necesaria, hace unos dias conversaba con alguien que me dijo: “uno no sabe lo importante que es aveces estar solo, pero es dificil tomar la desición de quedarnos solos por un tiempo”

La pregunta que me hago  es ¿como estar solos cuando la vida se ha vuelto tan acelerada tan complicada, cuando tenemos responsabilidades con nuestros hijos, con el trabajo, con la familia, con los demas?,  cuando uno mira la semana y se pregunta ¿Donde hago un hueco y saco un momento para estar sola? Hasta ahora, el unico momento de paz y soledad que tengo es en las mañanas, cuando me levanto a las 5:00 y me voy una hora a caminar, la gente me dice que estoy loca porque me levanto a esa hora, pero es el unico momento que siento que puedo estar conmigo misma.

Vivimos la vida llena de ansiedades. Leia en el libro de Benjamin lo siguiente: “ La ansiedad nos pone tensos, nos encierra en comportamientos defensivos y paraliza nuestra creatividad” Todo tiene su tiempo y hay un momento para hacerlo bajo el sol, cuando nos desesperamos la ansiedad acaba con nuestra vida, nos pone tensos, de mal humor, nos llena de comportamientos defensivos y no nos deja actuar de forma creativa.

Y prosigue Benjamin: “La esperanza por su lado llena de serenidad nuestra espera y nos dispone a acoger las modalidades casi siempre imprevisibles en la que Dios llega cuando se cumple su hora” Cuando aprendemos a esperar con paciencia a llenarnos de esperanza la vida se llena de tranquilidad serena, terminamos comprendiendo que Dios tiene su ritmo, su modo de hacer las cosas y que debemos estar tranquilos, porque el nunca nos ha defreaudado.

Pero hoy creo que solo teniendo momentos de soledad, solo tomando distancia de la vida y de los demas, podemos comprender e interiorizar la esperanza y esa paz, una vez hemos tomado distancia, entonces, podemos bajar a la vida cotidiana y llenos de esa paz empezar las transformaciones en nuestra vida.

Termino el mes de octubre, estamos a dos meses de que termine este año agitado, acelerado… hoy quiero pedirle a Dios que me ayude a “Tomar distancia, subir al arbol de la sabiduria y bajar luego a mi vida cotidiana, para terminar mi año llena de paz y esperanza”