«En medio de las complejidades de mi horario cotidiano, con todas sus exigencias, dicha imagen me recuerda que es importante, mas aún esencial y fundamental, mantener un espacio libre y abierto en mi corazón. Esto supone que pese a todas las exigencias, las distracciones y las dificultades que me asedian, debo intentar mantener la calma en mi corazón». Esther de Waal
Cuando los problemas nos acosan, cuando el trabajo parece no tener fin, cuando de la lista de pendientes borramos 3 cosas y anotamos 10, cuando termina el día y te quedas con la sensación de que no has hecho nada, pero has pasado todo el día trabajando, y llegas a casa y tienes deseos de tirarte en la cama, pero miras el bulto de la computadora y sientes que debes encenderla, para seguir trabajando, cuando pasa todo el fin de semana y sientes que te ha pasado por arriba porque has tenido que continuar trabajando.
Renunciar a la tensión y a las expectativas dejándome llevar simplemente por la órbita de Dios… Esperar… callar… prestar atención. Cuando logramos incluso renunciar a nuestras expectativas de lo que queremos o deseamos y logramos darle paso a los que Dios quiere para nosotros… Esperar … callar, calmar el corazón y dejarlo latir a un ritmo tranquilo y sereno.
He notado en los últimos dias que cuando estoy enojada y acelerada siento con tanta fuerza latir mi corazón, que he sentido que se quiere salir de mi pecho… he tenido la triste sensación de que no puedo mantener la calma en mi corazón. Escucho las palabras de Esther de Waal y me llegan a lo mas profundo de mi ser, porque las complejidades de la vida nos mantienen con el acelerador puesto y no paramos.
Hoy quisiera poder volar lejos, tranquila, serena, a donde tenga reposo y la calma vuelva a mi corazón. «Me digo: quien me diera alas de paloma para volar y hallar reposo! me marcharía lejos, viviría en el desierto y encontraría al fin la calma en mi corazón»
Hoy quisiera lograr mantener la calma en mi corazón.
Hola Carolina!
Sabes que yo deseo lo mismo desde el lugar opuesto…tu ya sabes la situación.
Un gran cariño a vos y a los tuyos
Marcial
Te agradecería Carolina, le avises a tu Padre, a quien tambien premié a su Blog, por el conocimiento. No me toma el comentario su Blog.
Cariños a Henry y familia 🙂
Marcial