«Cuando los cambios ocurren en nuestras vidas debemos acostumbrarnos al nuevo patrón de vida y simple y sencillamente aceptar el cambio, y tratar de disfrutar lo que se tiene y no llorar por lo que se ha perdido o lo que nunca se ha tenido. No podemos eludir los momentos de transito en nuestras vidas; hasta nuestro cuerpo nos hace ser conscientes de lo inevitable del cambio. La dificultad está en que, por lo general el cambio no se nos da muy bien, por lo que tratamos de aferrarnos a lo seguro y conocido. Atrapados en la miseria y la confusión de lo que estamos perdiendo, nos descubrimos sin fuerzas para creer que la nueva vida es mas que una lejana promesa. Debemos aprender a vivir el momento, sin mirar atrás o adelante, a la derecha o a la izquierda, sino tomando conciencia de que sólo siendo lo que somos puede darse en nosotros un crecimiento… Debemos comprender que el pasado nos trae al preciso momento en el que nos encontramos y que si hoy comenzamos de nuevo, también mañana seremos capaces de comenzar de nuevo y al día siguiente y de ese modo estaremos abiertos al cambio….»  Esther de Wall

Encontré esta  reflexión en el libro  «Buscando a Dios» de Esther de Wall, que me ha puesto a pensar en los cambios, suelo ser muy cuadrada,  la mayoría de las veces me gusta mantener la forma en la que hago las cosas, pero la vida no es así, la vida es un constante cambio, asi que pensaba que en realidad deberíamos aprender a  disfrutar lo nuevo que la vida nos traer y no pasarnos lamentando por lo que perdimos. Tal como dice la autora hasta nuestro cuerpo cada día nos hace conscientes de que ya no somos los mismos de antes, pero nos empeñamos en mantenernos, y nosotras las mujeres nos dedicamos a teñirnos el pelo y llenarnos de cremas que lo que hacen es retrasar el momento inevitable en que las arrugas y las canas comienzan a verse.

«Tratamos de aferrarnos a lo seguro y conocido» y no entendemos que si hoy logramos soltarnos del momento en el que nos encontramos podremos avanzar y seremos capaces de llegar caminar y aceptar los cambios.

Me llega a la mente una canción de  Mercedes Sosa que habla del cambio: «cambia lo superficial, cambia lo profundo, cambia el modo de pensar… cambia todo en este mundo, cambia el clima con los años, cambia el pastor su rebaño, y asi como todo cambia que yo cambie no es extraño… cambia el mas fino brillante, de mano en mano su brillo, cambia el nido el pajarillo, cambia el sentir de un amante, cambia el rumbo el caminante aunque eso le cause daño… cambia el sol en su carrera cuando la noche subsiste, cambia la planta y se viste de verde la primavera, cambia el pelaje la fiera, cambia el cabello el anciano … lo que cambio ayer tendrá que cambiar mañana… cambia… todo cambia…»

Debemos aprender a afrontar los cambios….