Hace mucho que no escribo en mi blog… tal vez hoy es un buen dia para retomarlo.
He pasado todo el día pensando que debo sentarme a escribir algo para la bendición de la cena de nochebuena, pero siento que en este fin de año estoy triste y no quisiera transmitir ese sentimiento a mi reflexión. Asi que vamos a ver que sale.
Hace unos meses mi hermano dijo que la vida de todos cambiaria a partir de este año, y la verdad es que ha sido un año que nos ha puesto a prueba la fe, la esperanza y la voluntad.
Personalmente creo que he aprendido que la vida es en realidad pasajera, más de lo que podemos imaginar, que, si no hacemos lo que soñamos ahora, puede ser que mañana sea tarde, que no importa los planes que hagas en este instante, en el siguiente, cualquier situación podría desbaratarlos y tendrás que volver a comenzar. Que lo único importante es el tiempo de calidad que le das a los que están a tu lado y a los que amas, porque es lo único que podrás llevarte cuando te toque el turno. Que las cosas materiales, son materiales y perecederas y lo único que vale son las personas y el amor que puedes darle a los demás. Que la familia es la única que siempre estará ahí cuando más la necesites.
También he comprendido que Dios es un Dios de Amor, que todo lo malo que ocurre en el mundo no es su responsabilidad, que, aunque sea duro admitirlo él no es todopoderoso, porque si el pudiera quitar la maldad del mundo, simplemente no dejara que ocurriera. Él no puede sanarnos, ni quitarnos los males como si fuera milagro, porque si así pudiera ser no dejaría que el mal llegara a nuestra vida. Asi que he decidido que lo único que voy a pedirle es fortaleza para enfrentar todas las cosas que lleguen a mi vida.
Hoy celebramos como cada año que Dios vino hasta nosotros en forma de un niño inocente, en medio de una realidad que podemos decir que es la que viven muchas personas hoy en día: pobreza, miseria, estar lejos de la patria que los vio nacer, violencia, terrorismo, pero Jesús hoy quiere volver a nacer y decirnos que, aunque parezca imposible, él quiere decir: Paz en la tierra a los hombres de buena voluntad. Así que, creo firmemente que, si transitamos por este mundo con buena voluntad, es posible que podamos ser transmisores de esa paz.
Feliz Navidad para todos y mis deseos de que esa paz llegue a vuestros corazones.