En estos últimos días me he estado cuestionando mucho la vida agitada que estamos viviendo. Pensaba en mi Blog, y que a pesar de que una de las cosas que mas disfruto es escribir, ni siquiera puedo sacar el tiempo para hacerlo.
Sigo con Albert Nolan en mi escritorio y a propósito el capítulo que estoy leyendo habla sobre esto: «El primer obstáculo que debemos superar es el activismo… no es cierto, sencillamente, que no podemos hacer nada para superar el activismo… el exceso de actividad se ha convertido en una obsesión… si no trabajamos mucho y no nos mantenemos ocupado empezamos a sentirnos culpables»
¿Hace cuanto tiempo que no me dedico simplemente a sentarme tranquila sin tener nada que hacer? Las veces que me veo en esa situación, es decir tranquila sin nada que hacer, simplemente siento que estoy perdiendo el tiempo; y que importante es aveces no hacer nada…!!! lo dice una activista, porque ciertamente me puedo describir como activista, ya que soy de esas que no puede estarse tranquila.
encontré una frase que en realidad me ha hecho pensar, reflexionar en estos dias: «En realidad, el activismo es la suprema distracción. Nos distrae de la conciencia de nosotros mismos y de la conciencia del mundo real. Nos distrae de la conciencia de Dios… aunque nuestras intenciones sean buenas y nuestro trabajo sea altruista, el activismo implacable puede hacer que nos veamos como Don Quijote: luchando contra molinos de viento y no contra peligros y amenazas reales… Despertar, llegar a ser mas plenamente conscientes y afrontar las realidades de la vida exige un cierto grado de silencio y soledad»
He pensado que en realidad hacemos cosas para distraernos a nosotros mismos y desenfocarnos de las cosas que son en realidad importante. «Hacer cosas» provoca que no tengamos tiempo para pensar en nuestra vida, y en lo que De veras Importa. Solamente cuando somos capaces de hacer silencio interiormente podemos escuchar nuestro corazón y enfocar nuestra vida hacia un objetivo real, hacia aquello que Dios en verdad espera de mi.
En estos dias he tratado de hacer silencio, y ¿les digo algo?: ¡Que dificil resulta!!!!
Seguiré contándoles otros asuntos sobre esto… pero ahora ha llegado mi momento de tratar de estar un rato en Silencio…
Tocas un punto muy interesante. Creo que lo que dice Dispenza puede tambien ayudar. ¿Cuánto de lo que hago es absolutamente necesario para cobrar? (he cambiado el varbo en lugar de ‘vivir’) y digo esto yo que tengo mi propia empresa y no puedo descansar si quiero cobrar… pero sí definitivamente voy a pensar sobre el asunto. Espero con interés tu segunda parte. Gracias eres una gota de alivio del alma, en internet.
A partir de enero solo trabajo en las mañanas; por tanto se supone que tengo toda la tarde para hacer un grupo de cosas que antes no podía hacer por falta de tiempo. Ahora resulta que sigo sin encontrar tiempo. El problema mío es más grave que el de la mayoría de los que tienen acceso al blog de Carolina: ¡Siento que se me está agotando el tiempo! Y hay tantas cosas que me gustaría hacer antes de partir.
De todos modos, trataré de disfrutar lo que me queda.
me gusto tu texto y estas en lo cierto.